Noticias ONU Cambio Climático — El valor de la economía verde ha alcanzado al sector de los combustibles fósiles y ofreciendo oportunidades de inversión más significativas y seguras, según un informe de FTSE Russell, proveedor de índices e información bursátil.
La economía verde se define como una actividad económica que contribuye a mejorar el bienestar humano y la igualdad social, a la vez que reduce significativamente los riesgos medioambientales y la escasez de recursos. La economía verde se caracteriza por ser eficiente, limpia, circular, de colaboración y baja en emisiones de carbono, y es además fundamental para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París sobre cambio climático.
En la actualidad, la economía verde vale tanto como la del sector de combustibles fósiles, representando el 6% del mercado bursátil mundial, con un valor equivalente aproximado de 4 billones de dólares estadounidenses, provenientes de los servicios de energía limpia, eficiencia energética, agua, gestión de los desechos y de la contaminación.
Si la economía sostenible mantiene su curso actual, en 2030 podría llegar a representar el 10% del valor del mercado mundial, siempre y cuando para entonces se hayan hecho inversiones verdes por alrededor de 90 billones de dólares.
Las empresas verdes generan mayores rendimientos
Según FTSE Russell, en los últimos cinco años, las compañías verdes generaron mayores rendimientos que la media del mercado de valores. El informe señala así mismo que existen grandes oportunidades para invertir en la economía verde gracias entre otros al movimiento internacional de apoyo a la acción frete al cambio climático y otros desafíos medioambientales.
“El cambio climático es la muerte del progreso y la prosperidad. No hacer nada al respecto es simplemente una mala inversión de cara al futuro”, dijo Patricia Espinosa, Secretaria Ejecutiva de ONU Cambio Climático durante la reciente Convención Mundial de la Industria Manufacturera en China. “Está claro que la nueva economía es limpia, verde y próspera, y animo a todos a que participen de ella”, añadió.
El informe analizó el impacto de una amplia gama de productos y servicios de diferentes sectores en la mitigación y la adaptación al cambio climático, el uso del agua, los recursos, la contaminación y la eficiencia agrícola.
Según el informe de FTSE Russell, la economía verde está creciendo en el seno de empresas de todos los tamaños, sectores y ámbito geográfico en contraste con la evolución del sector de los combustibles fósiles que se ha visto reducido. Aun así, son necesarios mayores esfuerzos para alinear la economía mundial con los objetivos del Acuerdo de París.
La importancia de la tecnología de las renovables en la economía verde
Las energías limpias alternativas, la energía solar y tecnologías más establecidas, como las centrales hidroeléctricas, juegan un papel importante en el crecimiento de la economía verde. Otras áreas clave de la economía verde son recursos como el litio para la producción de baterías, los materiales ligeros para aumentar la eficacia de los productos, los alimentos orgánicos o las semillas desarrolladas para aumentar los rendimientos agrícolas.
Según el estudio ya son 3 000 las empresas que cotizan en bolsa y que están expuestas a la economía verde. Estas empresas cubren el 30% del valor de mercado global cotizado y su volumen ha aumentado en aproximadamente un 20% desde 2009.
Lea el informe completo de FTSE Russell (en inglés).
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