Ejemplos alentadores de acción climática en la cadena agroalimentaria presentados en la Conferencia sobre el Clima de Bonn
28 Junio 2019
Artículo
African women farmers

Noticias ONU Cambio Climático, 26 de junio de 2019 – Tanto las soluciones energéticas descentralizadas y fuera de red, como las prácticas eficientes con respecto al uso del agua en la cadena agroalimentaria son fundamentales para crear resiliencia ante los efectos ineludibles del cambio climático, y para reducir la emisión de gases de efecto invernadero.

Esta fue la conclusión principal de una reunión de expertos en el tema durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de junio en Bonn.

Las varias fases de la cadena agroalimentaria mundial – desde la etapa de producción hasta las de distribución, procesamiento y cocinado – dependen aún en gran medida del uso de combustibles fósiles para la producción de energía, que, además de ser costosos y no renovables, producen el 22 % anual de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel global.

Durante la reunión de la ONU en Bonn, los expertos analizaron las interconexiones entre la seguridad hídrica, la seguridad energética y la alimentaria al referirse a asuntos relacionados con la creciente demanda de comida causada por el aumento de la población global el cual, sumado al cambio climático, está generando una presión significativa en la producción agrícola y de recursos naturales.

En Bonn, expertos y precursores presentaron los siguientes casos de estudio que se destacaron en materia de innovación:

  • Soluciones innovadoras para el bombeo de agua usando bombas hidráulicas: La compañía aQysa presentó bombas accionadas con energía hídrica, impulsadas gracias a su diseño de rueda hidráulica, el cual aprovecha la energía de los arroyos para bombear agua para la irrigación. Las bombas, que no necesitan combustible para funcionar, no producen gases de efecto invernadero y son, por tanto, una alternativa limpia en comparación con aquellas que operan gracias al diésel. Además, la tecnología es económica para los productores, dado que elimina los gastos operacionales asociados a la generación de energía por medio de combustibles fósiles. Esta tecnología fue puesta a prueba en Nepal y, desde entonces, ha sido implementada en 13 países.
  • Unidades solares de refrigeración “caseras”: La Universidad de Hohenheim demostró el potencial que tienen las unidades solares de refrigeración hechas por uno mismo en las fases de refrigeración y transporte en la cadena agroindustrial. Dicha tecnología depende de la energía solar para refrigerar y ha sido desarrollada y aplicada al proceso de refrigeración de la leche. Las unidades solares de enfriamiento son viables para pequeños y medianos sistemas de enfriamiento en la cadena de valores del sector alimentario. La viabilidad económica para la mejora y la reproducción de esta tecnología está siendo investigada en la actualidad por socios del sector privado aliados con iniciativas en curso del sector público.
  • Modelos de negocios y oportunidades para que el sector privado invierta en proyectos de desarrollo sostenible: GeoCode International destacó ejemplos de sistemas de almacenamiento de frío generados con energía solar en Nigeria, en donde el sistema de pagos de tarifa por servicio, o esquemas de pago PAYG (por sus siglas en inglés “Pay as you go”) han resultado atractivos para los pequeños agricultores que no tienen la capacidad de financiar el capital inicial necesario para invertir en nuevas tecnologías. Estos modelos de negocio, que proveen un servicio para sus clientes a cambio de una tarifa de servicio, permiten que los pequeños agricultores adopten nuevas tecnologías y, al mismo tiempo, genera un retorno de la inversión a largo plazo para las compañías.

La implementación de soluciones innovativas de energía y agua pueden traer beneficios de largo alcance. Dichas soluciones pueden reducir el desperdicio de comida, afrontar los problemas de pobreza energética en las comunidades rurales, minimizar los riesgos de salud asociados con la contaminación del aire doméstico, que se deriva de las fuentes convencionales de energía en los países en vía de desarrollo y, además, pueden aportar beneficios económicos gracias a el ahorro de los costos energéticos dentro de las comunidades.            

Gracias a la duplicación y ampliación de estas soluciones innovativas, varios países pueden maximizar el potencial de sus planes nacionales de acción climática o (las contribuciones determinadas a nivel nacional, o NDC por sus siglas en inglés), con miras a alcanzar los objetivos establecidos en el Acuerdo de París.

Durante el evento, Gonzalo Muñoz, el ‘champion’ de alto nivel de Chile, ha instado a los países y a los interesados que no son Parte a aprender de estos ejemplos y a ponerlos en práctica.

La reunión tuvo lugar durante las reuniones de expertos técnicos sobre mitigación de 2019 (TEM-M por sus siglas en inglés). Las reuniones de expertos técnicos de este año fueron organizadas y dirigidas por la Organización de las Naciones Unidad para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Corporación Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ), la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA) y el Instituto Internacional del Agua de Estocolmo (SIWI), con el apoyo de la secretaría de la CMNUCC.

Pratap Thapa, cofundador de aQsta, y Georgia Badet, fundadora de GeoCode International, se unieron a la discusión en torno al papel de las finanzas y la innovación para descarbonizar la cadena agroalimentaria, durante la Conferencia sobre el clima celebrada en Bonn (SB50). (Video en inglés)